Mientras EEUU rechaza que Palestina integre la ONU, Israel acelera construcción de asentamientos

La representante permanente de EEUU ante la ONU, Linda Thomas-Greenfield, declaró que su país no cree que una resolución en el Consejo de Seguridad lleve necesariamente a una situación que derive en una solución de dos Estados. En este contexto, Israel ha acelerado la construcción de asentamientos en Jerusalén Oriental. EEUU, siempre de 'ese' lado de la historia En este escenario hay que recordar que ya en 2011 la Autoridad Palestina solicitó su adhesión al organismo internacional, pero la solicitud nunca se presentó al Consejo de Seguridad. En aquel momento EEUU, que es uno de los cinco miembros permanentes del Consejo, dijo que ejercería su derecho de veto en caso de votación. "Es bastante falso, porque [a EEUU] les preocupa muchísimo lo que se pueda decir en el Consejo de Seguridad y la Asamblea General de Naciones Unidas, dado que al mismo tiempo que daban estas declaraciones, estaban mandando a sus Estados vasallos, satélites, por ejemplo, (…) a Malta, dado que son parte de la presidencia rotativa del Consejo, para que no reconozcan a Palestina. (…) Mientras el mundo se vuelve a favor del pueblo palestino, EEUU empieza a cabildear y a empujar. No solamente EEUU, también tenemos el caso británico, los dos patrocinadores del ente desde su fundación en 1948", señala el analista político Christian Nader. Y mientras EEUU ejecuta el rechazo de la adhesión de Palestina a la ONU, Israel no pierde el tiempo: ha acelerado la construcción de asentamientos en Jerusalén Oriental, con más de 20 proyectos aprobados o avanzados desde el inicio de la guerra con Hamás el pasado 7 de octubre de 2023. En este sentido, miles de viviendas serán ofrecidas a una población mayoritariamente judía en este territorio, que fue ocupado en 1967 por Israel y luego anexionado unilateralmente en el año 1980, una medida que nunca fue reconocida por las Naciones Unidas. "Es interesante y tétrico, porque a fin de cuentas los grandes patrocinadores del ente, el músculo del sionismo en Occidente, son los cristianos sionistas evangélicos que le meten millones al ente sionista, para desplazar la población, tanto musulmana, pero también cristianos de todas las denominaciones: católicos, protestantes, luteranos, melquitas y greco-ortodoxos. Entonces, lamentablemente por obvios motivos, se ponen los ojos del mundo en suelo gazatí, dado que el ente sionista ha exterminado a 36.000 palestinos en los últimos seis meses. Sin embargo, también en suelo de Al Quds, Jerusalén Oriental, y en suelo de Cisjordania, las atrocidades continúan", concluye Nader.