Orban sentencia: "Europa está cada vez más arrastrada a una guerra en la que tiene todo que perder"
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El primer ministro de Hungría, Viktor Orban, ha asumido su segunda presidencia semestral del Consejo de la Unión Europea, relevando a Bélgica. Horas previas a su asunción, ha marcado el territorio de lo que pretende sea su gestión, y ha sentenciado el espíritu guerrerista que domina en el bloque comunitario. ¿Estilo Donald Trump? "Hagamos a Europa grande de nuevo", es el 'trumpista' slogan con el que Orban pretende regar al bloque comunitario durante su gestión, que caduca el próximo 31 de diciembre. Entre las tareas que impulsa, figuran la mejora de la competitividad de la Unión Europea, el refuerzo de su política de defensa, la contención de la inmigración ilegal, la promoción de una política agrícola orientada a los agricultores europeos, y el abordaje de los retos demográficos, entre otros. Pero además, en vísperas de asumir las riendas europeas, Orban publicó una editorial en el periódico Magyar Nemzet, donde ensayó una serie de puñetazos sobre la mesa y de tirones de orejas. En este sentido, el conflicto ucraniano fue una de las cosas más relevantes a las que aludió. "Los burócratas de Bruselas quieren esta guerra, la consideran suya y quieren derrotar a Rusia. Siguen enviando el dinero de los europeos a Ucrania, han disparado a las empresas europeas en el pie con sanciones, han impulsado la inflación y han sumido a millones de ciudadanos europeos en dificultades vitales. Europa se ve cada vez más arrastrada a una guerra en la que el continente no tiene nada que ganar y todo que perder", disparó. Añadió que en todo lo referente a ese conflicto, a las autoridades comunitarias "nada les sale demasiado caro", al afirmar que "Europa está en crisis" y "la Unión Europea está en declive", debido a la política de la élite comunitaria. Respecto a esta publicación, el historiador y analista político Daniel Trujillo Sanz advierte que "aquí hemos visto a un Orban en el ámbito más puro, sin tapujos en la lengua absolutamente". "Es verdad que las élites europeas nos están conduciendo [a una guerra en el continente], estamos dándole todo a Ucrania. Yo creo que lleva razón en todo, no puedo 'quitarle una coma'". En otras palabras, Orban está tratando de explicar una realidad, que es la que se ha reflejado en estas elecciones [europarlamentarias] y se está viendo en todos los grandes países. Las viejas estructuras políticas están siendo desplazadas por completo, están siendo sustituidas, bien por otras con una fachada remozada, quizá algo distintas, con cambios, pero se están viniendo abajo, y los partidos tradicionales de los parlamentos, y si nos fijamos históricamente, especialmente desde la postguerra, el fin de la Segunda Guerra Mundial, la política tradicional europea está siendo barrida, hay partidos tradicionales que han desaparecido", explica Trujillo Sanz.