León XIV y el rumbo de la Iglesia, cinco retos para el nuevo Papa
En la sabana - Un pódcast de El Español

Robert Prevost, un estadounidense de 69 años, ha sido elegido como el nuevo líder de la Iglesia. Tras un cónclave breve, con sólo cuatro votaciones, enfrenta un gran desafío: convertirse en un papa que represente al mundo de hoy. Heredando el legado de Francisco, el primer pontífice que habla español y quechua, y que además es el primer papa en tener un móvil y una cuenta de Twitter, Prevost tendrá que afrontar varios retos importantes.Entre ellos, encontrar un equilibrio de poderes dentro de la Iglesia entre los conservadores y los llamados “bergoglios”, gestionar las finanzas del Vaticano, definir el papel de la mujer, fortalecer su relación con los jóvenes y perfeccionar su forma de comunicarse.El nuevo pontífice se inspira en León XIII, cuyo papado será recordado por su apertura al mundo moderno y por sentar las bases de la doctrina social de la Iglesia. Quienes lo conocen dicen que en privado suele repetir una frase: “La Iglesia no necesita más dogmas, necesita una revolución silenciosa”.En el capítulo de hoy nos acompaña la joven periodista Paula Martínez, quien vivió en primera fila, desde la Plaza de San Pedro, la llegada de un nuevo Papa. “Fue el mejor día de mi vida”, nos cuenta. Desde la sala de prensa del Vaticano, Paula comparte sus expectativas sobre cómo será la relación del Papa con los jóvenes. “Espero que sea un Papa carismático y que sepa comunicar bien”, dice. Además, comenta con humor: “Me gustaría que León XIV tuviera TikTok, es una herramienta muy útil”.Nuestra segunda invitada es Xisquia Valladares, monja y activista nicaragüense, quien participó en el primer sínodo en el que las mujeres tuvieron opción a voto, gracias a una decisión de Francisco. Con ella, abordamos los principales retos que enfrentará el nuevo líder de la Iglesia. “El mayor de todos es restaurar la unidad”, señala. La religiosa también opina que el primer Papa estadounidense “será un ‘pepito grillo’ para Trump” y que será un “gestor y pastor”, cualidades fundamentales en estos tiempos para la Iglesia.