La gran jugada de Mattel: de estar a punto de jubilar a Barbie a su renacer en Hollywood
Historias de la economía - Un pódcast de elEconomista - Lunes
La mítica muñeca que marcó las primeras líneas del pop moderno en 1959 casi vio su jubilación en 2014. Casi 10 años más tarde, un 'libro de jugadas' y el lanzamiento de la película que lleva su nombre, renacen a la figura y al espíritu rosa. Barbie llega a la pantalla grande en carne y hueso con los actores Margot Robbie y Ryan Gosling como protagonistas. La producción ha causado un revuelo sobrenatural con la tendencia 'Barbiecore', que ha empapado de rosa la víspera del evento hollywoodense del año. El equipo de marketing del filme no se ha quedado atrás y Barbie ya se ha infiltrado en todo. Desde cafeterías y cruceros tematizados, colaboraciones con marcas de moda, consolas de videojuegos hasta una casa real en Malibú que se ha puesto en alquiler en Airbnb. Toda una destreza estratégica de Mattel, que tuvo que reinventar a su personaje principal para salir a flote y retomar sus consolidados años dorados. Si bien el legado de Mattel abarca casi ocho décadas, no todo ha sido color de rosa para la Barbie. La inventora y cofundadora de la empresa, Ruth Handler, vio a su hija jugar con muñecas de papel y tuvo la idea de crear una más duradera. En honor a la niña, Bárbara, escogió el diminutivo para la muñeca y pronto empezó a producirse en la empresa de juguetes de su marido. Con los años, Richard Dickson, presidente y director de operaciones de Mattel, explicó que los consumidores no pensaban que la Barbie fuera relevante. Esto, unido a las fuertes críticas hacia el diseño de su figura, por promover estándares de belleza imposibles, la muñeca fue poco a poco perdiendo popularidad. Por este motivo, impulsó a la compañía a realizar una investigación de mercado interna. 2014 fue un año clave y la muñeca estuvo a punto de quedar jubilada en un estante. En ese mismo periodo, las ventas mundiales de las muñecas Barbie cayeron un 15% con ganancias en el primer semestre de tan solo 17,1 millones, un 85% menos que en el mismo período de 2013. Para revertir la debacle, Mattel se enfrascó en una estrategia integral de cambio de marca, conocido como el 'libro de jugadas'. En estos años apostaron por el lanzamiento de su línea ‘Fashionistas’, que incluía muñecas de todos los tamaños, tipos de cuerpos, ojos y cabellos para reflejar mejor la diversidad corporal.