Capítulo 94. La felicidad y tu perro

Hola a todos! Hace unos días que compartimos una infografía muy chula, hecha en colaboración con Mónica Custodio, y vimos que en pocas horas la compartisteis ¡una pasada de veces! Así que hemos decidido profundizar un poco más en ella y en qué consiste la “Felicidad Canina”. Los puntos básicos para acompañar a nuestro perro hacia la mejor versión de sí mismo 🙂 Antes de seguir me presento, soy Patricia Guerrero o más conocida como PAT Educadora Canina, dedico mi vida profesional a divulgar y compartir el conocimiento sobre el mundo canino. Me encanta colaborar, sumar, compartir… De hecho, ahora mismo estoy de resacón emocional porque esta semana pasada celebramos Sant Jordi, el día del libro y la rosa en Cataluña. Y ha sido increíble. Montamos una parada muy perruna, llena de libros escogidos por Myriam de Family Dog, y acompañada por muchos amigos y colegas de profesión que pasaron el día con nosotras como Ingrid Ramón, Mónica de Felicidad Canina, Fernando Pérez y Mónica Custodio. Gracias a todos los que pasasteis para compartir un rato con nosotros! ¡AL LÍO! Lo que os decía, hoy quiero hablaros sobre la FELICIDAD CANINA. Y no encuentro mejor manera que compartiros un fragmento del primer capítulo del libro que escribí “El mejor educador para tu perro eres tú”: “Si te pregunto qué necesita tu perro, seguramente se te vendrá a la cabeza: comida, correr, un terreno grande, cariño… Déjame decirte que no vas desencaminado, pero después pensarás que hay truco en la pregunta y que depende de a qué tipo de perro me refiera, ¿verdad? Todos los perros tienen las mismas necesidades y cuando digo todos, me refiero a perros de raza pequeña, grande, de diferentes colores o edades. Lógicamente hay que adaptarlas a su edad, tamaño y carácter. Pero no pienses que porque tu perro pesa solo tres kilos no necesita salir a la calle. Muchos de los habituales problemas de comportamiento de los perros son fruto de no tener correctamente cubiertas todas sus necesidades, puede que algunas ni siquiera seas consciente de que lo son, pero aquí van algunas cosas imprescindibles para que consigas que tu perro sea un perro feliz.” ACOSTUMBRA A TU PERRO A TODO TIPO DE ESTÍMULOS Si tu perro tiene miedo, ayúdale a superarlo. Hay muchas cosas que podéis hacer juntos para hacerlo. Si, por el contrario, tu perro es muy sociable y no tiene problemas con ningún estímulo ayúdale a mantenerlo, sigue acompañándole para que juegue con otros perros o llévalo a pasear por lugares diferentes. Incluso refuerza su actitud ante situaciones inesperadas como, por ejemplo, en la explosión de un petardo. ACOSTUMBRA A TU PERRO A ESTAR TRANQUILO EN TODAS PARTES El hecho de no hacer nada, parece algo fácil. ¡Total, se trata de no hacer nada! Esto que a simple vista puede parecer fácil es una de las cosas más difíciles para un perro y también para algunas personas, entre las que me incluyo. ENSÉÑALE A ESTAR SOLO Los perros son animales gregarios, es decir, viven en comunidad. De manera que para ellos no es natural estar solos, por ello deberemos dedicar tiempo a enseñarles que estar solos significa descanso y tranquilidad. ¡A JUGAR! El juego sano y divertido es aquel que tiene inicio y fin, el que permite que tu perro nunca se pase de vueltas, es decir, que se excite tanto que ya no pueda pensar. Dedica tiempo cada día a jugar con tu perro. Sin prisa y sin objetivos, solo por el mero hecho de divertirte con él. Puedo asegurarte que vuestra relación cambiará radicalmente.