[EXPEDICIÓN CANINA SUR] Semana 4: Azuaga!

Antes de partir hacia Azuaga, sentí una necesidad: Ir a casa, necesitaba ir al mar. Si! esa es mi casa. Si está cerca …todo se ve diferente. Es el gran amor de mi vida, no sé si lo sabes, pero cuando tenía 20 años me fui a Cádiz para estudiar Ciencias del mar y luego dediqué unos cuantos años más a investigar… Así que, forma parte de mi vida de una manera muy profunda. Mirando el mapa, ví que Lisboa quedaba cerquita y tenía playa! Allá que fuimos, además nunca había visitado Portugal . En Lisboa fui directa a un camping, ya que, tenía que lavar la ropa. Es todo un proceso. Prefiero hacerlo en campings que en lavanderías. Así, puedo dejar la ropa e irme a hacer mis cosas. Sin darme cuenta todas las veces lo estoy haciendo de noche… El camping de Lisboa está genial, en la parcela tienes grifo con agua, electricidad y un banquito de esos de acampada. Parece una tontería pero tenerlo así cerquita, es muy cómodo. La gente del camping fue super amable con Bongo y Vespa. Y la verdad que es un gozada dormir entre Eucaliptus. Un viaje así te hace conocerte mucho mejor, y la verdad, que lo mío es lo verde y azul. jajaja Visitar Lisboa fue muy chulo, me recordó a Barcelona , por su ambiente innovador, gente joven haciendo cosas chulas… Lo que más me encantó son las fachadas cada uno de un color y forma, geniales!! Os grabé todo lo que os estoy contando… pero perdí la cámara unos días después, y no había descargado los vídeos… Lo siento!! 🙁 Me encanta visitar las ciudades,  perdiéndome por los barrios donde vive la gente del lugar.  Con sus currantes, pisos de las afueras, esa es la ciudad de verdad. Así que, dejamos a la guerrera descansando en Lisboa Factory, un lugar genial! Son muchas tiendas y cafeterías cuquis . Están dentro de lo que antes era una fábrica.  Pero se encuentra a una hora y cuarto caminando del centro. Quién me conoce sabe que me apasiona caminar descubriendo calles, y si son nuevas, ya es la caña! . Nos estamos pegamos unos pateos importantes. Según mi pulsómetro, ese día hicimos 32 km. La misión más difícil fue: ir la lavabo!!! . Lisboa tiene fama de dog-friendly. Y realmente les encantan los perros. Todo el mundo saluda a Bongo y Vespa pero según nos explicaron por normativa ahora mismo no pueden entrar en los locales. En las terrazas no hay problema, pero realmente fue difícil encontrar un lugar que nos dejaran comer dentro. Nos acogieron muy bien en Flower Power, un restaurante muy cuqui en pleno centro. A la vuelta, encontré otro lugar dentro del a propia Lisboa Factory, donde pudimos entrar y trabajar un poco dentro. Su nombre es Café Da fabrica, está justo en la entrada! Pero lo bueno viene ahora… cuando llegamos al mar . Aix… qué momentazo, quizá te parece exagerado, pero de verdad, que los que hemos nacido cerca del mar… es como una necesidad.. Una de mis ilusiones era despertarme en el mar.  Despertarse con olor a mar, y poder hacer el primer paseo por allí… Por primera vez nos instalamos fuera de un camping con la cama abierta. Nos instalamos en la playa  do reinha. Cómo me daba un poco de miedito, le pedí a unas chicas alemanas si me podía instalar a su lado.  Una madre y su hija que llevan más de 6 años viajando , es su forma de vivir. Durante la noche no pararon de pasar coches, no sé qué negocios se traían entre manos.. pero me asustaba un poco cuando se paraban cerca de la furgo…   Aunque como no podías ser de otra manera, diluvió a tope! así que el paseo idílico por la playa se convirtió en sortear la tempestad jajaja Una vez saciada las ganas de mar, emprendimos la parte de viaje más emotiva para mi. Próxima parada:  Azuaga, el pueblo natal de mi yayo. Para mi, fue mi héroe, hay mucho de él en mi . Su manera de ver la vida, de atreverse, de tener la mente abierta . Para mi, el primer emprendedor de la familia.