Mitos sobre cachorros- Capítulo 193

Consejos sobre cachorros que harán que tu cachorro sufra. -Déjale llorar la primera noche  -Métele la mano en la comida para que se acostumbre – No le humanices  -No le toques que refuerzas el miedo -Déjalo llorar que se acostumbrará  Querida exploradora canina,  Cuando Bongo, mi primer perro como adulta llegó a mi vida sentí mil inseguridades.  De hecho, me dedico a esto porque alguien me dijo que Bongo, mezcla de Rottweiler, se iba a comer a los niños. Así que, decidí estudiar y estudiar para ayudarle. En el camino me creí muchos mitos, que hicieron que la convivencia con él no fuera armoniosa.  Y mi entraña y la suya se quejaran mucho. Hoy en este audio quiero destriparte algunos mitos que sigo escuchando, y lo peor que se siguen aplicando. A muchos a pesar de sentir la educación de otra manera os hacen dudar de vuestro criterio.  ¡Vamos allá!  -Déjale llorar la primera noche  Los cachorros llegan a casa después de pasar (en el mejor de los casos) sus primeras semanas de vida junto a su familia canina. Acompañado y atendido todo el tiempo por su madre.  Y los humanos les metemos a dormir en un lugar desconocido y frío como es la cocina. Y no sólo eso si no que les ignoramos si piden ayuda.  Esto origina inseguridad y desconcierto en el cachorro. Acompáñale bien de cerca esos primeros días, poco a poco irá cogiendo autonomía (que no independencia) y encontrará su lugar de descanso en casa.  Cuanto más le acompañes mejor será el apego entre vosotros, y mejor se quedará solo y  explorará.  Lo sé, es anti-intuitivo, parece que fuera al revés.  -Métele la mano en la comida para que se acostumbre Esta práctica origina que el cachorro asocie tu presencia con la comida como un conflicto.  Incluso hay cachorros que sin tener ningún problema con esa situación desarrollan protección de recursos. Es decir, que se sienten incómodos si estás cerca de algo que consideran un tesoro.  Así que, te propongo que le des la vuelta. Juego de acercarme al cuenco es bueno  Positiviza estar cerca de él cuando tenga su tesoro, puedes darle algo suculento, para que lo asocie con algo increíblemente bueno.  Esto es para cachorros sin una asociación previa, si éste ya ha tenido ‘mala’ experiencia, habrá que dedicar tiempo a desaprender.  Es decir, aumentar la distancia para no ser invasivos.  El juego del intercambio de tesoros comestibles  Otra práctica es el juego del intercambio. Es decir, escoger dos tesoros comestibles con el mismo valor (pata de pollo por ejemplo) y hacer intercambio. Sin entrar en conflicto. Esto hará que el cachorro asocie tu presencia con la comida como algo bueno.   Juego de aguantar el tesoro También puedes hacer de sujeta tesoros. Es decir, simplemente aguantar el hueso para que lo pueda masticar tranquilamente. Hazlo poco tiempo y luego déjaselo libremente.  Ten en cuenta que quieres ser el origen de buenas experiencias, no de molestias incómodas.